El restaurante Mític se encuentra dentro del Hotel Puigfrancó, situado a las afueras de Camprodon, en plena montaña.
Queríamos pasar un fin de año inolvidable, después de buscar hoteles con restaurantes que hicieran un menú degustación encontramos este.
Restaurante moderno, donde solamente hace 3 años que está abierto, el 2017 estaba en la guía Michelín y este año se lo han vuelto a dar.
Nos impresionó la mesa tan bonita con su chimenea llena de leña, lástima que no hiciera nada de frío.
El menú degustación constaba de 7 platos, 2 postres y cotillón.
Berberechos con manzana verde
Entrante frío. La manzana verde era un granizado de manzana. La combinación de los berberechos con el granizado era refrescante y ligero. Un buen comienzo!
Ostra
Para mí fue el plato estrella, apasionada de las ostras me encantaron y más cuando veo que todos los otros comensales están haciendo cola para dármela!
La salsa que llevaba la ostra hacía que no se perdiera el gusto de la ostra. Por cierto ostra del Delta de l’Ebre, carnosa y muy gustosa.
Foie caramelizado con texturas de frutas
La combinación del foie con las frutas era genial. Uno de los mejores platos y es que el foie lo hacían ellos mismos, os podéis imaginar como estaba de bueno!!
Envuelto de calabacín con cóctel de langosta
Poca cosa os puedo decir de este plato, el canelón estaba perfectamente ejecutado.
Suave, gustoso y con muchas ganas de ver el siguiente plato.
Pad thai de codorniz, jengibre y verduras
Este plato fue el más flojo de todos a mi gusto. La codorniz estaba perfectamente cocinada, pero la combinación creo que no estaba muy acorde con el resto de los platos. Ahora, estaba muy bueno!
Lubina a baja temperatura con cremas de colores y aceite de humo
Y es que el pescado a baja temperatura está riquísimo porque no pierde la esencia del pescado, la lubina estaba perfectamente cocinada, con el gusto a fumado del aceite y las cremas. Gran plato!
Cochinillo de Segovia
Hace falta ir a Segovia para comer un buen cochinillo? la respuesta está clara, No!
Este cochinillo se deshacía en la boca y estaba crujiente por fuera. Una maravilla!
Muy buen producto y perfectamente ejecutado.
Por último hubo la degustación de los dos postres que los maridamos con una botella de Champagne Bolinger, tremendo!
El peque comió un menú genial, unas croquetas de la casa, pan de coca de cristal con jamón de bellota y este filete con patatas fritas. Muy gustoso y tierno, un gran menú infantil!
Los vinos que maridamos con los platos fueron Notenom i Origen, eran vinos que combinaban muy bien con lo que estaba comiendo.
Un gran acierto ir a este restaurante, la calidad del producto es muy buena, es un restaurante joven, muy creativos pero a la vez quieren que no se pierdan los sabores de los productos. El servicio amable, dinámico, joven, eficaz. Si pasáis por allí no os lo perdáis, vale la pena, y de paso id al Hotel Puigfrancó, un gran restaurante para volver a ir.
El precio del menú degustación era de 150 € por persona pero si en la mesa eran 4 el menú era de 120 € por persona, el peque costó unos 50 € con botella de cava Pimkie incluida.
